Hepatitis A
La persona infectada es un portador contagioso del virus de la Hepatitis A de dos a seis semanas tras haber sido infectado. A pesar de ello, el 90% de las personas no tienen ningún sintoma en este periodo. Tan solo el 10% de las personas contagiadas tienen síntomas a las dos semanas de ser infectadas, estos síntomas son fiebre, dolor de hígado, vómitos, fatiga, diarrea e ictericia. En la mayoría de ocasiones, el virus acaba desapareciendo con el tiempo.
Hepatitis B
La persona infectada por el virus de la Hepatitis B puede ser contagiosa a los tres meses de haber contraído a infección, pero en el 90% de los casos no muestra ningún síntoma. Lo que significa que la infección puede contagiarse sin ser consciente a tu pareja. En la mayoría de las ocasiones el virus acaba desapareciendo con el tiempo, pero en en el 10% puede derivar en una enfermedad crónica.
Hepatitis C
La persona infectada con el virus de la Hepatitis C puede ser contagioso a los tres meses, pero no tener ningún síntoma, lo que significa que la enfermedad puede desarrollarse y contagiarse sin que la persona sea consciente. La infección por Hepatitis C deriva, en gran cantidad de casos, en una enfermedad crónica y daña seriamente el hígado.
No existe cura para las fases avanzadas de cualquier tipo de Hepatitis, tan solo descanso y evitar cierto tipo de sustancias, como anticonceptivos orales y alcohol.
Existe una vacuna para la Hepatitis A, pero debe ser adminsitrada antes del contagio para ser efectiva. También existe una vacuna para la Hepatitis B que se administra, generalmente, en edades tempranas.
De cualquier forma, la mejor prevención contra cualquier tipo de Hepatitis, es la utilización del preservativo.